
La Semana Santa es un tiempo para reflexionar sobre valores fundamentales como el amor, la solidaridad y el perdón. Nos invita a mirar hacia el prójimo con empatía, reconociendo la importancia de servir y acompañar a quienes más lo necesitan. También es un llamado a la humildad, a reconocer nuestras fallas y buscar reconciliación, tanto con los demás como con nosotros mismos. La esperanza, representada en la resurrección, nos anima a renovar nuestras fuerzas y a confiar en que siempre es posible empezar de nuevo. Estos valores nos inspiran a vivir con mayor profundidad y sentido.